La llegada

No pude evitarlo por lo que me reí ante su reacción. "¿Acaso el golpe había sido tan duro que no se acordaba de nada?" dije para mi.

-Pueees... digamos que asi porque si, te caiste por la ventana y en un intento de aterrizaje de emergencia caiste sobre tu pierna y al parecer tienes una lesion en ella- dije como si de un medico se tratara.

Mire a Gumi con una ceja levantada cuestionando su respuesta *dudo mucho que se cayera asi como asi* me dije, aun asi se lo tenia bien merecido por hacer estupideces.

-Mira que eres torpe, caerte por la ventana...- ccomente mirando fijamente a Nero.

Tu... me acuerdo de ti, eres la de la entrada, la del nombre ridiculo, no te vengas haciendo la profesional, no te pega nada-Dejé de hablar, esa chica siempre me hacia gastar mucha energia hablando, estaba harto de ella

Mire a mi Hermana fijamente

Tu y yo sabemos que eso no ha pasado así, escapa a cualquier logica racional... algo ha tenido que provocarlo...uf... estoy demasiado dolido como para pensarlo ahora

Procure volver a levantarme resistiendo el dolor de la pierna, lo cual fue en vano, estaba realmente dañada, por lo que volvi a caer al suelo. lo cual no solo hirio mi cuerpo si no tambien mi orgullo,

Me gire hacia mi hermana y grite-¡¿Vas a quedarte ahi parada como una tonta o piensas ayudarme de una vez?!, y que sepas, que sospecho que esta caida tiene algo que vez contigo

"hay que ver que es borde" dije mientras soltaba un bufido. Recogí el quitaselmalte y lo guardé en mi mochila. Volví a ponerme en pie recostándome nuevamente sobre el arbol y me puse los cascos para evitar oír esas estupideces:

-...yume no naka de miru yume maboroshi no kuni
sono koe ga watashi ni wa kikoeru...- Comencé a cantar por lo bajo un cacho de la cancion, mientras miraba a Neru espectante.

Mire a Nero algo molesta, *¿por que tengo que ser siempre yo la culpable?*. A pesar de que tenia ganas de largarme de alli e ir a practicar algunas canciones me agache y ayude a Nero a levantarse. Una vez en pie puse su brazo sobre mis hombros y le sostuve al andar.

-Deja de quejarte por una vez, vamos a la habitacion para que reposes- dije de mala gana.

Ya era hora-pensé-Me quejo y me meto mucho con ella, pero realmente es la unica que se preocupa por mi, aun asi, por mucho que me quiera o me aprecie, no debo dejar que se le suba a la cabeza. Que desastre, acabo de llegar y tengo la pierna demacrada, ahora me costara andar almenos tengo...¿mi movil? ¿donde esta mi movil? ...uf... Aqui esta, A salvo

Mientras pensaba esboze una sonrisa sin darme cuenta

Vi como Neru cargaba sola con su hermano, me quité los cascos guardándolos en el bolsillo de mi falda y dije:

-¿Quieres que te ayude Neru?- dije sonriente, de repente vi como Nero sonreia... un momento... ¿¡Sonriendo?! O.O

-No hace falta, puedo con el- despues mire a mi hermano y me fije en la sonrisa de su cara-¡¿Que te hace tanta gracia?!

Pense rapido, no me habia dado cuenta de que estaba sonriendo, rapidamente dije lo primero que se me ocurrio-Solo pensaba en lo pateticas que podeis llegar a ser, ¿Acaso no es obvio?

La sonrisa de mi cara se borró en cuanto escuché las palabras de Nero, bajé un poco la cabeza y apreté los puños y los labios. Después me tranquilicé y miré mi bicicleta... que tiempos aquellos pensé. Volví a mirar a Neru y dije cruzandome de brazos.

-Creo que sería mejor llevarlo a su habitación, así podrán atenderlo mejor- dije mirando su pierna y algunos cortes que tenia en la cara.

Por un momento pense que esa seria la mejor opcion, ademas a el no le hacia ninguna gracia estar conmigo *esto ocurre desde pequeños*. Sin embargo preferi no hacerlo, queria ocuparme yo de el, al fin y al cabo el vino aqui por mi culpa.

-Me da lo mismo, que haga lo que quiera, sin embargo aun no se ha instalado asi que tendra que quedarse con nosotras.- esa fue la unica excusa que se me ocurrio.

No necesito que mires por mi chica del nombre ridiculo-Dije cabreado con ella port meterse donde no la llamaban-Y con respecto a ti hermanita, no pienso quedarme en....

Pensando-¡Callate estupido!, te van a cuidar y no vas a tener que mover ni un misero dedo, ademas seguro que se compadecen de ti por enfermito, ¡aprovechate de la situacion!

¿Sabes que? Sera mejor que me lleves contigo

Me pare en seco y mire a Nero con cara sospechosa y con una ceja alzada, aquello no me olia bien, seguro que nos ocultaba algo, el nunca tenia esos cambios de humor radicales.

-Pensandolo mejor, tienes que independizarte, ¿te has ido de casa no? tienes que empezar a cuidarte solito.

Callate... callate.... me pones la cabeza como un bombo, tienes una voz demasiado aguda,-me gire hacia mi hermana-Y lo hare, lo hare, pero estoy enfermito, y apenas puedo moverme u.u

Ahí ya no aguanté más, me puse delante de él y le di una bofetada mientras decía por lo bajo:

-Eres un estúpido arrogante...- Me di la vuelta y comencé a andar en dirección a las habitaciones.

Sujete mas a Nero mientras caminabamos para evitar que callera. Me habia percatado de todas sus intenciones, pero no podia dejarlo tirado en la hierba con la pierna rota, por mucho que deseara hacerlo.

-Esa chica tiene demasiado caracter...pero te lo has ganado, ademas en cuanto te venden la pierna te buscaras la vida, y eso sera muy pronto.

Llegamos a la habitacion y le coloque en mi cama, al parecer Gumi no habia llegado aun.

El golpe me pillo completamente desprevenido, ademas, estaba practicamente inmovilizado, por lo que me dio de lleno.Un golpe asi en otras circustancias no me hubiera hecho demasiado daño, pero estaba lleno de heridas, asi que senti bastante dolor que disimule como pude

¡SERAS!....arrogante....-Empece gritando, pero lo ultimo apenas fue un susurro imperceptible, Sin duda esa chica tenia caractar, mas de lo que me habia imaginado en un principio, tendria que vigilarla de cerca y probarla

Si... si... te prometo que cuando me venden te dejare en páz

Me deje caer en la cama

Hice oidos sordos al grito de Nero y fui a la cocina para tomar un poco de agua, después subí las escaleras y entré en las habitaciones viendo a los hermanos, me tumbé en mi cama con los cascos puestos nuevamente con la música a todo volumen mirando al blanco techo.

De mi bolsillo saqué la cámara de fotos y comencé a verlas...

Me tire en la cama y por un momento disfrute de todo el confort que aquel paraiso me ofrecia, me volvi a sentir agusto y el cuerpo dejo de dolerme.Despues de cerrar los ojos durante unos minutos, los volvi a abrir, y alli, estaba Gumi mirando unas fotos, Mentiria si dijera que no tuve realmente interes en lo que podria haber en esas fotos, asi que disimuladamente desde mi posicion, comenze a mirarlas

Mientras veía las fotos de los lugares que visité me fijé por el rabillo del ojo que no era la única interesada en ellas. Seguí pasando un par de fotos hasta que dije indiferente:

-Si no te interesan mis cosas... ¿por qué cotilleas en mis fotos Rubito?- dije girando la cabeza hasta mirarlo cara a cara.

¿Que te he dicho de hablar?-Dije con voz prepotente-Ademas, ¿Quien te crees que eres, que estuviera mirando en esa direccion no quiere decir que estuviera mirando tus fo..., mira, dejalo

Me encogí de hombros.

-Como tu veas rubito...- Cogí mi mochila y empecé a guardar cosas en los armarios, mientras tarareaba por lo bajo una cancion que sonaba en mi mp3: Highway to hell. Miré la guitarra que había colocado en una de las esquinas de la habitacion y la saque afinándola.

Baje a la cocina y prepare un cacao caliente para mi molesto hermano. Volvi a la habitacion y los encontre a los dos mirando en la camara de Gumi. Despues ella la guardo y empezo a trastear con una guitarra.

-Vaya par de tortolitos, cuando querais intimidad buscaros otro cuarto.- dije sacando la lengua en señal de disgusto- Toma Nero.- Le tendi el vaso caliente y me sente en una silla cerca de mi cama.

Me paré al ver esa enorme mansión ante mis ojos,impactaba bastante.
-Bien,me quedaré aquí.
Serenamente entre por la gran puerta,posé la mi maleta rosa en el suelo y mire la mansión,era mas impresionante desde dentro.Cogí la maleta y me dispuse a buscar las habitaciones.
Cuando llegué abrí la puerta lentamente.
-Hay alguien ahí?